miércoles, 5 de octubre de 2011

TU ÉXITO


TU ÉXITO (extraído del libro "La cultura del amor" de Edú Vardé)


El camino hacia la clave del éxito
tiene muchos obstáculos,
matices, colores,
amigos, enemigos,
vallas, valles,
soles, sombras,
noches, faros,
grises y opacos,
cálidos, fríos,
acompañantes y abandonados.

Pero la clave del éxito no es fin.
Tal vez es simplemente el medio.
                ¿Cuál es el objetivo?
                          ¡Sólo tu pecho lo sabe!

Más allá de la razón,
de las distancias,
de los por qué,
de los miedos,
de los amores
tu cabeza formará
estructuras defensivas,
a fin de no arriesgar
el equilibrio encontrado
por apostar a algo más
que un futuro.

El cartón siempre quedará colgado en tu living…
Y,
                  ¿De qué te servirá?

La cuestión es alcanzar
la mayor cantidad
de momentos felices
a lo largo de tu vida terrenal.

(Si es que fuera de ésta existe otra vida).

Lo material va y viene,
es efímero
No sirve para nada más
que mantener a un sistema
cruel, asesino y capitalista.
Por eso,
en este momento que la duda cabe en todo tu ser
y que frente a ti están:
las opciones, las incógnitas,
las dudas, la incertidumbre,
los enigmas, la vacilación,
las fluctuaciones, las elecciones futuras,
las expectativas de vida,
las esperanzas…

            ¡Decide!
            ¡Solo tú tienes en tu mano la clave de tu éxito!

Deberás creer, caminar, correr, saltar,
trepar, caer, reptar, gambetear,
pararte, inclinarte, doblarte,
erguirte con la frente alto,
empujar, equilibrar,
golpear y recibir golpes,
driblar, eludir, aludir, manifestar,
reír, llorar, avanzar,
retroceder, avanzar nuevamente,
bajar, subir, girar, esquivar,
sonreír en demasía,
apoyarte y ser apoyo,
cantar, hablar, gritar,
silenciar,
dar motivos, negarlos…

estudiar, trabajar y vivir (sobre todo vivir)
tener tus ratos y tus logros,
tus amigos y tu fe,
tener tu música y tu libros,
tu futbol y tus ideas…

TENER (por lo menos) UNA FUENTE
INAGOTABLE DE AMOR…

…pero sin olvidar
jamás de los jamases,
nunca de los nunca
en todo tiempo y espacio,
cueste lo que cueste…

…mantener siempre la mirada fija, pensante y el objetivo claro…
(aunque todos lo vean borroso)

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