viernes, 19 de noviembre de 2010

PROYECTO: LEY DEL LIBRO

PROYECTO: LEY DEL LIBRO

 

Les cuento un poco como surge la idea de la “ley del libro”. Resulta que en el mes de noviembre, hace apenas una semana, participé del encuentro de jóvenes poetas en la feria del libro de La Rioja. Bueno, en una de las actividades nos explicaron que allá cuentan con una ley que apoya, fomenta y colabora con la edición de libros que sirvan para estudio o sean de interés cultural.

Me pregunté si a nivel nacional o en la provincia de Buenos Aires existe algún sistema parecido, en el cual el Estado “renuncia” al cobro de $60.000 anuales en concepto de ingresos brutos para que los contribuyentes los destinen a la edición de nuevos libros. La respuesta fue, obviamente, NO!

Para mi punto de vista este proyecto debe llegar a la legislatura provincial, así sentar otro precedente más, para luego Luchar por una ley nacional que impulse en el arte un trabajo que sustentable.

 Sino leamos nuestra constitución. Dice en el artículo 32: "El Congreso federal no dictará leyes que restrinjan la libertad de imprenta o establezcan sobre ella la jurisdicción federal." Yo creo que las leyes actuales sólo colaboran con el seudo monopolio de las grandes editoriales que son las únicas beneficiadas relegando a los demás a transitar entre sombras. Sino también el artículo 42 de la Carta Magna que preceptúa: "...Las autoridades proveerán a la protección de... los derechos de los usuarios y consumidores...", con la finalidad de garantizar el bienestar general. Acá me pregunto, ¿El bienestar de los escritores, de las personas que, como yo, entregadas al arte, dónde radica? Creo que es hora de generar estas zonas óptimas para el desarrollo, para la expansión y con ellas brindar una fuente estable de trabajo, tanto como para las editoriales pequeñas, editores jóvenes, imprentas y demás entidades y pymes inmersas en este ciclo; como así también ejercer el derecho de usuario y consumidor de poder acceder a las creaciones de mis coterráneos, de todos y cada uno que ayuden a desarrollarme como persona. El Artículo 14 bis- dice: “El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes…” Es mi derecho, el tuyo y el de todos, hagámoslo valer con una nueva ley que impulse al desarrolle y no que recorte nuestras posibilidades y capacidades.

Desde ya, muchas gracias por su atención. Voy a estar juntando firmas para adjuntar al proyecto. Cualquier consulta que necesiten la pueden hacer a  laculturadelamor@gmail.com

 La Ley Nº 6539 de la provincia de La Rioja que fuera sancionada el 8 (ocho) de Octubre del año 1998 se puede leer y descargar en:

http://www.culturalarioja.com.ar/Down/leydellibro.doc

Sí, no se sorprendan, hace más de diez años que venimos atrasados. 

EDÚ VARDÉ

martes, 9 de noviembre de 2010

ROBERTO FONTANARROSA - MALAS PALABRAS

No sé que tiene que ver con lo de la internacionalización, que, aparte, ahora que pienso, ese título lo habrán puesto para decir que una persona que logra decir correctamente in-ter-na-cio-na-li-za-ción es capaz de ponerse en un escenario y hablar algo —porque es como un test que han hecho—.

Algo tendrá que ver el tema, éste, el de la malas palabras, por ejemplo, con éste, como el que decía el amigo Escribano (José Claudio Escribano), se nota que es tan polémica esta mesa que es la única a la que le han asignado «escribano» para que se controle todo lo que se dice en ella.

Creo que es un aporte real en cuanto al intercambio, me ha tocado vivir cuando he tenido que acompañar a la selección argentina a partidos (de fútbol) en Latinoamérica. El intercambio que hay en esos casos de este lenguaje es de una riqueza notable; es más, en Paraguay nos decían «come gatos» que es, estrictamente para los rosarinos, «un rosarinismo».

Un Congreso de la Lengua, es más que todo, para plantearse preguntas. Yo como casi siempre hablo desde el desconocimiento, me pregunto por qué son malas las malas palabras, quién las define como tal. ¿Quién y por qué?, ¿quién dice qué tienen las malas palabras?, ¿o es que acaso les pegan las malas palabras a las buenas?, ¿son malas porque son de mala calidad?, o sea que ¿cuando uno las pronuncia se deterioran? o ¿cuando uno las utiliza, tienen actitudes reñidas con la moral?

Obviamente, no se quién las define como malas palabras, tal vez sean como esos villanos de viejas películas como las que nosotros veíamos, que en un principio eran buenos, pero que al final la sociedad los hizo malos.

Tal vez nosotros al marginarlas, las hemos derivado en palabras malas, lo que yo pienso es que brindan otros matices muchas de ellas. Yo soy fundamentalmente dibujante, con lo que uno se preguntará: ¿qué hace ese muchacho arriba del escenario? Manejo muy mal el color, por ejemplo, pero a través de eso sé que cuanto más matices tenga uno, más puede defenderse, para expresarse, para transmitir, para graficar algo, entonces, ¿hay palabras, palabras de las denominadas malas palabras que son irremplazables, por sonoridad, por fuerza, algunos incluso por contextura física de la palabra. No es lo mismo decir que una persona es tonta o zonza que decir que es un pelotudo. Tonto puede incluso incluir un problema de disminución neurológica realmente agresivo.

El secreto de la palabra pelotudo, ya universalizada —no sé si está en el diccionario de dudas—, está en que también puede hacer referencia a algo que tiene pelotas. Puede hacer referencia a algo que tiene pelotas que puede ser un utilero de fútbol que es un pelotudo porque traslada las pelotas; pero lo que digo, el secreto, la fuerza; está en la letra t. Analicémoslo —anoten las maestras—: está en la letra t, puesto que no es lo mismo decir zonzo que decir peloTUdo.

Otra cosa, hay una palabra maravillosa que en otros países está exenta de culpa —esa es otra particularidad, porque todos los países tienen malas palabras pero se ve que las leyes de algunos países protegen y en otros no—, hay una palabra maravillosa, decía, que es carajo. Yo tendría que recurrir a mi amigo y conocedor, Arturo Pérez Reverte, conocedor en cuanto a la navegación, porque tengo entendido que el carajo era el lugar donde se colocaba el vigía, en lo alto de los mástiles de los barcos para divisar tierra o lo que fuere, entonces mandar a una persona al carajo era estrictamente eso, mandarlo ahí arriba.

Amigos mexicanos con los que estuve cenando anoche me estuvieron enseñando una cantidad de malas palabras mexicanas. Ahora que lo pienso creo que me estaban insultando porque se suscitó un problema con la cuenta a la hora de pagar. Me explicaban, que las islas Carajo son unas islas que están en el océano Indico.

En España, el carajillo es el café con coñac y acá apareció como mala palabra, al punto que se llega a los eufemismos se decía caracho es de una debilidad absoluta y de una hipocresía... ¿no?

A veces hay periódicos que ponen: «El senador fulano de tal envío a la M a su par…». La triste función de esos puntos suspensivos, realmente el papel absurdo que están haciendo ahí, merecería también una discusión acá, en el Congreso de la Lengua.

Voy a ir cerrando, hay otra palabra que quiero apuntar que creo es fundamental en el idioma castellano, que es la palabra «mierda», que también es irremplazable. El secreto de la contextura física está en la r —anoten las docentes— porque es mucho más débil como lo dicen los cubanos: miELda, que suena a chino y eso —yo creo que ahí está la base de los problemas que ha tenido la Revolución cubana—, quita de posibilidades de expresiva.

Voy cerrando, después de este aporte medular que he hecho al lenguaje y al Congreso, lo que yo pido es que atendamos a esta condición terapéutica de las malas palabras. Mi psicoanalista dice que es imprescindible para descargarse, para dejar de lado el estrés y todo ese tipo de cosas. Lo único que yo pediría (no quiero hacer una teoría) es reconsiderar la situación de estas palabras. Pido una amnistía para la mayoría de ellas. Vivamos una navidad sin malas palabras e integrémoslas al lenguaje, que las vamos a necesitar.

Texto adaptado de su transcripción.

lunes, 1 de noviembre de 2010

¡ULTIMO MOMENTO! ¡URGENTE!


PROCESO DE INVESTIGACIÓN ARMAMENTISTA

Lean todos, atentamente:
Estados unidos conjuntamente con la ONU han revelado un sumo secreto. Hace algún tiempo se ha descubierto un poderoso armamento a prueba de defensas y radares, capaz de destruir y aniquilar todo a su paso. Nadie puede especificar cuando fue, pero se cree que existe desde que el mundo es mundo y el tiempo es tiempo. Hay fuentes que dicen que los primeros rastros históricos se hallan perdidos. En algunos textos antiguos se ha denominado a este elemento vil y sin sentido el culpable de las desgracias de la humanidad. Yo no soy quien para juzgar, así que me atengo a la realidad circundante.
Aclaro que todavía sigue el proceso de investigación y evaluación, pero según fuentes oficiales, es imposible de comprender y analizar correctamente. Calculan que para el fin de la eternidad estarán listos los resultados, pero el porcentaje de eficacia no superará en ningún caso el 3,5% ya que cada una tiene sus particulares “características”.
Por último, les dejo una recomendación: Estén atentos, pueden andar por ahí aparentando ser inofensivas, pero les confieso que no hay nada peor que una mujer resentida.


martes, 26 de octubre de 2010

lo que a uno le sucede de tanto aguantar

entonces tomo un libro
hago como que me interesa leer
aunque realmente
odio a Borges
y no porque sea malo
sino porque es absurdo
escuchar lo que sienten las viejas esas
que se excitan cuando la voz gruesa
del locutor
dice:
“casi con desdén, hace fuego”
y una vez cada tres meses
se repite la escena
ellas ríen
él goza de su popularidad
ellas se frotan las manos
arrugadas
y muerden sus labios
flojos
como los culos que esconden
de la luz roja
que hace rato nadie
les hace ver
yo ahí
en silencio
observo
me transformo en el increíble chupaculos
que aguarda el momento de
dar el zarpazo
y decirles
o sugerirles entre líneas
que también soy tan grandioso
que maté al don fierro
y reviví al muerto
que nadie se atrevió
aunque eso me parece estúpido
y falto de originalidad
mientras tomo un libro
y hago
como que me interesa leer Borges

   EDÚ VARDÉ

lunes, 18 de octubre de 2010

Una Respuesta y un tema recurrente

Maxi, lamentablemente sólo tengo 140 caracteres para poder expresar mi mensaje en Twitter. Ahí el porque de lo escueto del mismo. Te cuento que a pesar de las contadas palabras que pude enviarle tuve y tengo una intención, tal vez, demasiado esperanzada de que lo lea personalmente. Pero no sólo me quedé ahí, sino que me propuse un reto superior y mucho más intrínseco. El que entienda (y acepte) lo sobreentendido de “Mejor brindar herramientas útiles (en todo sentido).”


Cuando hablo de herramientas, estoy hablando de eso que nos llena de dignidad, de ese trabajo estable para un padre y una madre, de esa buena alimentación, nutritiva, que hace de combustible para nuestro cuerpo y para la posibilidad de pensar con claridad, de buenos lugares para vivir (pero no como regalo del clientelismo que ejercen, sino de la posibilidad real de poder acceder a una casa digna y propia), de educadores profesionales que no estén limitados por la maraña compleja de variantes que impide llevar a cabo su artesanal laburo de educar con afecto y buenos valores a todos los pibes del país, de poder cimentar un futuro, un desarrollo sustentable en nosotros mismos y en el país que tantos soñamos.

¿Me entendés? No estoy hablando sólo de una netbook o de un plan social que sirve para juntar votos, estoy hablando de algo más profundo y radical, de algo que no apareció con los K sino que viene desde hace años, de algo que vi moverse desde su interior y sigo viendo girando cíclicamente devorando todo a cuanto pase. Estoy hablando de una verdadera reforma, un verdadero cambio, un justicia que se base en beneficiar a los justos y no a defender a los “otros” (como dije en algún lugar: que la justicia le devuelva a los buenos su bondad”)

En fin, tal vez me quede con las ganas de encender una luz, por más pequeña que sea, es las personas que lean esto. (Que no sé si es una, son dos o mil, no me importa. Porque si consigo que alguien encienda su fuego y eleve la voz, voy a saber que no estamos solos en este rumbo)

¡PAREMOS LA RUEDA!

Desde hace rato nos vienen Garchando! Sino mirá:

“Si los pueblos no se ilustran, si no se vulgarizan sus derechos, si cada hombre no conoce lo que vale, lo que puede y lo que se debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas, y después de vacilar algún tiempo entre mil incertidumbres, SERÁ TAL VEZ NUESTRA SUERTE MUDAR DE TIRANOS SIN DESTRUIR LA TIRANÍA.”


MARIANO MORENO (1778 – 1811)

No creamos en todo los que nos dicen y veamos nosotros mismos la verdad, Ni aparatos devoradores de futuro, ni medios que nos vendan las cosas cambiadas, un poco de sinceridad y voluntad para una Argentina mejor.

martes, 12 de octubre de 2010

jueves, 19 de agosto de 2010

Poema real nº 1

qué
t r i s t e z a
saber que

la llave



del cielo



brilla en tus manos



y así



y todo



c  o  m  p  r  e  n  d  e  r





dolido





y





moribundo:





la mejor forma





de amarte





que tengo







es







el silencio







y la









d    i    s    t    a    n    c    i    a

lunes, 9 de agosto de 2010

Relatividad


Contando que cuando busco formar oraciones coherentes a máxima velocidad puedo decir unas 100 palabras por minuto y que si hay algo que me motiva es hablar de ti, de tus formas, de tus silencios, de tus ojos y de tus manos, hago la ecuacion correspondiente y me dan unas 2000 palabras en veinte minutos.
Bueno, acá está el quit de la cuestión, sólo para que vean que las matematicas no son exactas y que don Albert tenía un poquito de razón... 

te veo,
el tiempo es eterno
y quedo mudo
con ranitas saltando en mi corazón.

lunes, 14 de junio de 2010

BREVE SOBRE DIOS

 
En una de las tantas tabernas celestiales, Dios bebe, conversa y juega una partida de dados con un grupo de ángeles y demonios. Está en disputa el alma de uno de los más célebres mortales del siglo XX, el señor Einstein. En realidad, lo que está en juego es la soberbia cabeza del señor Einstein, quien en el año 1927, en el hotel Metropole de Bruselas, afirmó: "Dios no juega a los dados".
 
Alberto Ramponelli ("Una costumbre de Oceanía", 2006, Ed. Simurg).

lunes, 7 de junio de 2010

Mi silencio

No sé qué decir para explicar este momento.
Creo que no tengo palabras
y se me acabaron los gestos.
Sin embargo no es vacío, ni nada...
sino
¡Un universo entero!

Edú Vardé

(Inédito)

miércoles, 26 de mayo de 2010

El contador de cuentos dijo:


Dependencia ontológica... vos/yo.

Esta guerra es mi culpa, la tuya o la de él…

es mia…. indiscutiblemente.
Soy el santo, el amante o el cerdo infiel…
el amante, el mejor amante.
Soy el guerrero, el escapista o el cobarde…
el guerrero sin dudas.
El mejor, el peor o uno mas de tu lista…
el mejor y no hay lista.
Soy servicial, ventajero o descartado…
servicial.
Soy egoísta, pasajero o enamorado…
lo dejo a tu criterio (enamorado).
Soy tuyo, mío o de nadie…
de nadie pero quiero que seas mio.
Para siempre, por un tiempo o descartable…
PARA SIEMPRE AMOR!
El portero, el plomero o el partero…
ninguno.
El señor, el profesor o el ratero…
el profe, mi profe!
Soy luz, oscuridad o farolero…
sos mi luz en la oscuridad.
Soy tiempo, historia o momento…
sos tiempo mi historia y el momento.
Soy espacio, galaxia o tormento…
galaxia, porque me llevaste hasta ahí.
Soy paz, ambición o lamento…
sos inconfundiblemente paz!
((Soy león, rana u osito))
Sos un mi osito y un león en grande!!! Porque sos mi león salvaje que guiará mi vida…. Y rana…..si me decís te amo sos rana!

Entonces dícese que el hombre que temió lo que temía, fue a contar un cuento conocido... y contó nomás el cuento que contaba el contador de cuentos de aquel viejo y verde pueblo que siquiera existe en los mapas. Sí, contó un cuento mirando desde arriba el puente angosto y soltó al ente que habitaba en él, lo dejó caer de entre sus dedos para salar el agua que ahora si tiene nombre argumentado. Será el fin de lo finalizado, un cuento contado que no se debió contar... o ni siquiera escribir. Léase: PAZ.

martes, 11 de mayo de 2010

Vienes


Vienes y traes tras tu sombra los pasos de de ciertas supersticiones que no me agradan.
Lo sabemos desde que las escrituras dejaron de ser pensamientos y las cartas cayeron sobre la mesa del living dejando mi verdad sobre tu abrazo.

Qué le puedo hacer, te quiero ver venir
esquivando la lluvia dorada de este y todos los otoños,
pateando adoquines de sales que me joden la vida
y aguas que no quiero sufrir más,
sino es por vernos crecer.

¡Dios! Sabes que vienes y engrandeces todo,
todo cuanto pueda existir o inventemos:
contigo el aura lunar se espesa,
los soles del espacio de acercan a mi centro,
el universo es bautizado y … me haces latir.
Aunque no sé si es un latido justo
o un temblor que viene de tus labios
despacio temblando en mis oídos cuando juegas a decir las palabras que realmente quiero que digas cuando nada tiene sentido si tu moreno nombre no me renace en cada milímetro de tiempo,
llegando a evocar cada fantasía soñada que se vuelve espera y camino
y derramar todo cuanto brindo recordando lo que soñé contigo.

Vienes siempre cuando quiero sentirme vivo
desde el rincón benévolo del oeste usando tu sigilo y el silencio
y así, como quien no quiere la cosa, desbaratas con dos palabras un esquema firme,
o no tan firme.
Bueno, lo sabes, no es firme cuando cabe la posibilidad de que llegues en algún momento para ser tierra de mi mundo fantástico.
Te quiero caminar, recorrer, descubrir y volver a reposar sobre el abismo de tus manos blancas.

Acaríciame el rostro cuando mire tus ojos y no diga nada de todo esto que sabes.
Bésame y no vuelvas a preguntarme lo que ya te he dicho.
Es que me incomodo solo,
es que no sabes que más allá de todo
quiero que seas realmente mi mujer
.

miércoles, 28 de abril de 2010

Crónica de ...

No viviré doscientos años, amor. Le dijo la madre a su hijo cuando el cáncer se declaró como enemigo principal del sueño eterno que era proteger de todo a su pequeño cachorro.
Tal vez me vaya mañana o pasado; o dentro de unos meses. Tenés que ser fuerte y seguir adelante porque te crié como un león valiente que no teme a nadie ni nada.
Nunca te caigas. No bajes los brazos. Se lo que tú quieras ser. Tienes en tus manos el poder de elegir más allá de todo sistema, de todo amor, de toda barrera. No te detengas, no lo hagas nunca. Vuela en las estrellas. Surca los mares. Cruza los prados verdes a pie. Escala las montañas más altas, más allá de temerle a las alturas. No sufrirás el vértigo, te lo prometo. Se el rey que de niño soñaste ser. Utiliza ese “no sé qué” en función del bien. No mates a tus sueños por nada ni nadie. No dejes de sonreír ni cuando cierres el cajón, porque ahí guardas una parte de tus sueños y utopías. Mantenlo abierto más allá de mí, por ti. No dejes de creer que se puede. No consumas odio. No digas que no a tus impulsos, ni al latir de tu corazón. No silencies a tus ideas bonitas, ni tu guitarra que me vuela la cabeza. No llores porque me voy. Todos nos vamos en algún momento. Es inevitable. Crece fuerte y sabio. Busca los rinconcitos mágicos de tu infancia, los de tu adolescencia y los de tu madurez. Procura apoyarte en tus amigos. Patea esa pelota que tienes bajo el brazo como si fuera la muerte que enfrentaré de tu mano. No elijas el infierno de la tristeza y sí el cielo de tu amor.
Hijo, no cometas los mismos errores dos veces. Con una es suficiente para comprender y aprender. No dejes de equivocarte, porque sino no aprenderás jamás.
El tiempo se me acaba y me verás postrada en esta cama, sin dormir ni comer. No te asustes amor, es una cuestión biológica de la enfermedad. Y si se me cae el pelo con el tiempo, no te burles, están prolongando el momento. La sangre que derramaré en las noches límpiala rápidamente, no arruines los pisos de tu casa. La casa que con mi sudor te dejo. No definas las cosas por la negativa y sí mirando la positiva. Llega a viejito siendo un león sabio y comprensivo, con el pelo largo, enrulado y gris. Nunca dejes de ser feroz, ni de defender a tus amores. Promueve todo lo que yo veo en vos, nunca lo dejes olvidado. Vuela alto, muy alto. Más alto todavía. Más allá de la cima del cielo, de las estrellitas del firmamento, de los oscuros agujeros negros, de las galaxias infinitas. Llega junto con dios en un abrazo pleno. Abraza a tus amigos y a tus enemigos también, pues ellos te ayudan a ser quien eres. Y no te olvides que jamás será vacío el vacío, jamás será sola la soledad, jamás estarás solo en la derrota, ni jamás me dediques tus victorias. Yo estaré con vos en tu camisa, en tus uñas, en tu sangre y en el momento en que tus ojitos furiosos se ponen verdes.

Sí mamá, tenés razón. No vivirás doscientos años.

Seis meses después, mientras la mañana nacía y el sol asomaba por la ventana. El hijo tomó fuerte la mano débil de su madre y mirándola con sus ojos (por ese entonces verdes pero no de ira), le dijo suavecito al oído. Con un ritmo y un tono distintivo, como el que se usa en la galantería romántica. Con el fuego ardiendo por dentro. Inmerso en las llamas de los sentimientos. Algo que nunca le había dicho. Algo que pesaba toneladas y valía más que todo el oro y el dinero del mundo. Algo que había atesorado por más de dieciocho años. Algo que estaba latente como respuesta a sus instrucciones de seis meses atrás:
Sí mamá, tenés razón. No vivirás doscientos años. Vivirás más de una eternidad en mi alma.
Te amo.

Mientras ella cerraba los ojos por última vez y volaba feliz a la eternidad.
Edú Vardé
Nº 24 del libro "La cultura del amor"

miércoles, 21 de abril de 2010

Qué es ser de izquierda.

Esta noche pido prestado un texto:

"Gabriel Macaroff escribió la siguiente metáfora:

Qué es ser de izquierda. Ser de izquierda no es ser comunista, antiimperialista o anticapitalista; no es ser oposición al gobierno. Ser de izquierda va mas allá de un mero pensamiento o idea del Estado; va mas allá porque ser de izquierda significa dinamismo, movimiento, reforma; no puede identificarse a un espíritu dinámico, ágil, transformador y luchador con ideas estáticas, totalitarias y definitivas.

Figúrense una vía de tren, y sus estaciones. Cada estación es una concepción política, y cada tren es una sociedad. Una sociedad de derecha llega y se queda en una sola estación, aunque no sea la más apropiada para sus pasajeros; una sociedad de izquierda, siempre cambia de estación, buscando la felicidad de su pueblo. Seamos trenes, no meras estaciones; seamos trenes en movimiento, no conglomerados de gente dentro de un habitáculo inmóvil. El cambio general debe empezar con el propio cambio; si no te animás al cambio, no sos de izquierda."


jueves, 15 de abril de 2010

Tiempos (Lunes 19/10/2009 1:10 AM)



Él se sentó aquella tarde, en el sillón de pino que descansaba bajo el techo de chapas de la galería que aún da al patio trasero de la casa. Como todas las tardes, luego de un arduo día laboral, reposó su cuerpo y se dedicó a saborear el elixir redentor del tabaco puro en esa vieja pipa de madera marrón y marfil africano. La tomó con su mano derecha, áspera de tanto labrar el campo y arrear el ganado, y la llenó de aquel polvito mágico que guardaba en el cajón antiguo de la repisa del living. Sacó un cerrillo del bolsillo derecho de su bombacha rasgada y sucia por las andanzas de la jornada y encendió el fuego del placer. La primera chispa iluminó el rostro de la señorita que se sentaba con cara angelical y rasgos infantiles y voló hacia el cielo para transformarse en un lucero. Una imagen de infancia idealizada brotaba de cada rincón de la niña no tan niña, de la mujer no tan mujer, de la adolescente con dos corazones. Esbozó un par de palabras, dos o tres oraciones que no llegué a escuchar y que poco a poco fueron transformando el rostro cansado de aquel hombre adulto. El cejo tembló haciendo un esfuerzo sobrehumano para no fruncirse y delatarlo. La barba tupida ocultó los gestos de desagrado y dolor. Sé, por las palpitaciones de su corazón galopante, que sus esquemas machistas de libros de antaño añejan las pautas que la descendencia simplemente viene a romper. Pero vi. Sí, vi en el negro oscuro de sus pupilas, allá en lo más profundo de la noche vuelta luz en la oscuridad, el brillo de un amor inmensamente eterno. El linaje de sangre hace indestructible la unión de dos almas aladas frente a los vientos. Ni tiempo, ni distancias saben de algún punto débil, no pueden vencer y perecen sin gloria para el terror.
Día a día la panza crecía, apenas era un boceto de historia. No había sexo que revelar. Es más, las fajas fueron ocultando los primeros meses. Nuestro amigo no había aprendido a aceptar el destino. Ese destino que muchas veces no nos escucha y hace lo que quiere con nuestra vida; y no hay dios que recoja las plegarias de un futuro ideal. Pero, como escuché en algún paraje del camino, vivir tiene mucho de eso que llamamos incertidumbre y bifurcadas.
Los soles nacían y las noches descansaban mientras la casa tomaba lenta y dulcemente ese color rosa con tintes de amor en pomo. Los muebles comenzaron a cambiar: la cuna rustica hecha por las manos del señor que lentamente envejecía, el moisés que esperaba a su nueva dueña, las manos de mamá que ideaban nombres y futuros, los sueños de papá reflejados en el vientre que insistía en crecer y crecer. Ya no había faja, ni manta que tapara la felicidad de una madre radiante. Ya no había nada que evite el milagro de vivir.
Y llegó. Fueron dos kilos cuatrocientos gramos de belleza, entre llantos de felicidad, entre abrazos a diestra y siniestra, entre risas que seguirán retumbando en la eternidad de esa sala.
No recuerdo su nombre y, al fin, no es lo que interesa. Sino, lo que no puedo obviar son: sus manitos frágiles en busca del pecho materno que encierra los límites de este mundo nuevo y desconocido que sólo transmite inseguridad sino es junto a ella. Ni puedo obviar, que los esquemas machistas siempre perecen frente a la mujer de la vida. Y, queridos amigos, esta niña traía bajo su brazo la gloria de derrumbar nefastos esquemas de tiempo de antaño para equilibrar las partes. Al final, simplemente era la mujer de su vida, portadora de su sangre y de su fe.
Luego llegó su primer pasito. En el mismo patio que la inseguridad había dialogado con la razón un año y medio atrás.
Y después del paso, la palabra. Que no hizo más que traducir al castellano lo que entre ellos dos, hombre cada día más mayor y niña plena en desarrollo, se decían con la mirada pura y cómplice.
El verde siempre fue el color que por naturaleza gobernó el paisaje de ese pueblo sin maldad. Ella corría libre por los prados y él la contemplaba con el alma desnuda al amor, ella jugaba sin comprender que el mañana tiene algo denominado “tiempos”, y que los tiempos, por confluencia de esas cosas que no se pueden explicar, muchas veces apremian y joden. Pero no se puede escapar a los tiempos. Alguien los puso ahí y con ellos hay que aprender a convivir. Tiempo de jugar a cabalgar como su héroe lo hacía, tiempo de aprender a leer y a escribir, a sacar cuentas con los dedos como herramienta fundamental, tiempo de escondidas y de picas, tiempo de leche y chocolate, tiempo de ser quienes queramos ser en nuestra imaginación, tiempo de disfrutar del milagro de vivir sin más responsabilidades que ser inconscientemente feliz, tiempo de estar.
El calendario fue cortando hojas a la par del otoño, y con ellos, las responsabilidades fueron cambiando, la gente creciendo, las despedidas doliendo, los enojos palideciendo los amores que nadie querían que te lleguen se fueron acercando. Pero tiempo de ser señorita llegó y fue un secreto que no le contaste jamás de los jamases.
No aceptaba que la historia se repitiera, que ese angelito que dios le regaló para ser feliz se fuera volando a los besos de otro hombre, quién sabe con qué intenciones. Es verdad, quienes nos celan en silencio son quienes más nos demuestran que nos aman.
Y no puedo hablar de la cara monstruosa que se reflejó en el espejo en el momento que se enteró que partías de viaje sola, sin la familia, con amigos. El grito en el cielo espantó a la manada de pájaros que levantan nido sobre el fresno de la casa lindera. Sonrojado de vergüenza admitió que no quería perderte. Pero el tiempo dictó sentencia y partiste. Él, por cuestiones de vivir y de salud, ya no podía encender su vieja pipa.
Ya estabas realizada en mujer, con sueños y esperanzas puestas en un futuro personal que no era egoísta, sino que intentaba llenar con la luz de tu felicidad los prados del pueblo humilde que la familia te regaló para verte y disfrutarte crecer y formarte.
Entonces cabalgaron, tú sobre el corcel de acero que te lleva a la jungla de asfalto y él salvajemente cabalgó su ultima hazana por los extensos terrenos de la felicidad de su pago. Ciento veintiséis kilómetros que la vieja Esmeralda separa de la aparente cercana Suipacha. Pero, repito, que no hay distancias que separen dos corazones.
Suena el celular mientras regresas al departamento de la fábrica de futuro en libros y microscopios que te enseñan a dar a luz. Desesperada corres a tomar el tren al interior. No hay más información que un: te necesitamos hoy acá. Las ideas giran y giran, las lágrimas se vuelven una parte más de tu rostro. El corazón galopa con la furia de la desesperación. Galopa como él, como tú. Sube a la garganta y suplica salir en forma de grito. Sientes que el viejo vagón no es lugar para blasfemar contra dios y la vida, y partes a respirar el fresco aire del estribo abierto de par en par frente a la noche azul que brilla sobre el mar de estrellas.
El cuerpo tiembla, no hace falta decir nada más. Ya sabes qué está sucediendo. Lo sabías desde antes, pero no lo podías asimilar. Estas derrotas duelen, mayormente, de por vida y un poco más también. Piensas en arrojarte al vacío. Carece de sentido el latir de este corazón, se escucha de la voz entrecortada que las lágrimas dejan escuchar de tus labios partidos por el dolor y la furia.
Tomas un cigarro de la cartera, lo llevas a la boca con dificultad. Alguien que siempre está ahí acompañándote lo enciende, la miras y la abrazas, como si no desearas nada más que retroceder el tiempo y volver a empezar. Ella se va, no quiere molestar en tu intimidad. Te sientas nuevamente a mirar el cielo nocturno mientras fumas. El humo viaja hacia atrás a contracorriente del viento y lo envidias por no poder hacer eso con el tiempo. Las cenizas de esa punta de fuego que gira sobre tus dedos nerviosos escalan hacia el cielo azul y profundo de la noche estrellada, toman de la mano a aquel lucero que hacía veinte años había nacido. Se aferran fuerte, más fuerte, mucho más fuerte y cruzan la estratosfera. Pasan por un agujero negro hacia un universo paralelo y crean una galaxia nueva en sus nombres, para estar siempre unidos por amor, por amor de verdad. Para enfrentar la muerte de esta tierra y llegar a ser eternos sin necesidad de nada más.
Y ahí, cuando nosotros levantemos la vista y busquemos los por qué de los tiempos de vivir, su dureza y crueldad, veremos el negro oscuro de sus pupilas, allá en lo más profundo de la noche vuelta luz en la oscuridad, es el brillo de un amor inmensamente eterno.
Y sólo sonreiremos…
Sí…
Sonreiremos…
Al fin y al cabo en mi galaxia no hay tiempo, ni espacio, ni muerte, ni enfermedad y de ahí nadie me lo puede quitar.

Mis tardes, la lluvia y tu imagen

Hace dos días que mis tardes son grises,
es que el manto de nubes se quedó a vivir
sobre la Buenos Aires melancólica.

De repente este otoño tiene aroma a invierno
y mis manos ansían tu rostro dormido,
y la caricia que te envuelve por la espalda
que se transforma en reales ganas de ser tu siesta.
Sí, es tan real sentirte mía
que te tengo aquí junto a mi beso
a un costado del mundo cotidiano
a un costado de lo demás que ya no me importa.

Miro al sillón rendido que tiene de etiqueta tu nombre
y veo el deseo que crece y crece,
tal vez pueda ser que me pone nervioso
latir por ti y no tener de tu piel los laureles.

Ay, cuánto más esperaré por vivir
el milagro de verte, feliz y sonriente
apretando fuerte mis manos desnudas
cuando abrazo tu cintura y lo demás nos es indiferente.
Ya nada quiero, más que ser eternamente
la lluvia que recorre lenta y armoniosa
cada milímetro de tu cuerpo, cada nota de tu música.
Eres el borde de un milagro
y una parte de dios en vida.

Eres bella desde el alma hasta el cielo
si por cielo tomamos la infinidad del cosmos
y retornar desde el confín del universo
sólo para ser tu suspiro en el viento.

Pero no un suspiro ocasional
cuando la nada se mezcla en una idea
sino ser el aire que se hace alma
y renace cada tarde cómplice de la dicha
que esconde ser feliz al verte sonreír.

¡Qué más quiero!

Al final, tomo el control y te miro
esperando que ojala algún día cambie mi suerte
con la facilidad que cambio los canales
sólo para volver a verte.

Pero el problema más importante
no es que simplemente cambio y ya no estás.
Sino es: que aunque haga lo haga,
aunque conjure a los más antiguos ancestros
aunque reúna a las estrellas
y elimine tu lunar de mis anhelos;
ya no puedo evitar esto que es imposible e inevitable,
esto de ser tu fiel
y siempre llevar
tu mágica imagen grabada en mis retinas.

martes, 30 de marzo de 2010

Fuuuuuuuuu

Viento,
palmo a palmo las sonrisas traen olores
aire,
fresco por la ventana del tren.
Un do
un chasquido silencioso
un re
un tema nuevo y cotidiano
la realidad
y el momento que te libera.



Viento,
las puertas abiertas y alguien colgado
tal vez del estribo
que se sincera con la gente y vomita
verdades.

Así que sostenme fuerte
te pido
por un instante más,
casa está
cada metro más cerca.

Viento,
la sonrisa se me escapa
y que me importa
que me miren feo o digan
y hablen
de que mi guitarra rasguea
y tu manos me hablan
y sólo
tú y yo entendemos.

Si es viento,
el soplo de vida que recuerda
el día a día
de una canción que hace rato
dejó de ser
una canción desesperada
y canta
con el viento de mis pulmones.

Viento, mierda.

Manto de segundos que se regeneran
y se hacen
y renacen, una vez
y otra vez,
y repiten y repiten
esto que
me hace simple como el viento.

Ser feliz
es más bonito y más sabroso
cuando el sol
brilla en nuestras manos.

¿O era un fa,
o eran sus manos,
o era el destino
o era mi llanto?

domingo, 21 de marzo de 2010

El príncipe del arco iris

...



Cuenta la historia que se cayó de un cometa que venía de lejos, de otro sistema solar, con olor fresco a música, con sabor a besos nuevos.
Cuando lo vi por primera vez pensé que era un niño travieso jugando por las calles porteñas, detrás de alguna pelota redonda que sólo rueda, rueda y rueda. Como yo, que voy de la cama al piso, del baño a cobertor y de la heladera a lo imperfecto de sonreír de a ratos, como de a ratos tampoco sonrío y lloro.

Sí, lo vi debajo de una luz multicolor que nacía de su pecho. Creo que algo en su sonrisa me dijo que era el justo, creo que algo en su pelo me invitó a quedarme un rato más. Pero de lo que si estoy segura, es que el brillo de sus colores me hizo volcar, o volar, o volcar y volar.

Hacía tanto que no volaba, esta ciudad no se presta para despegar cuando las alas rotas no se llegan a curar.

Es que instintivamente prefiero seguir por lo adoquines de mi esquina segura, esa donde nadie puede doblegar mi corazón, donde resguardo mi reino.



¿Pero si esta vez estoy equivocada?
¡Ay, no sé.!
¿Para dónde disparo ahora?
¡Qué matete tengo en la cabeza!
¿Soy yo o es él?
¿Qué más da?, ¡Me inspiro en vos, ché!


Me pierdo en los colores de tu sonrisa, en la música que viene despacito y me endulza la oreja. No quiero esperar, tengo que inventar algo, alguna excusa simple para poder reencontrarte.
Quiero que vengas a mi castillo, con las luces de tu interior dejando restos de una noche a tu lado.

Crucemos el arco iris una vez, lo demás será cuando tenga que ser.



Edú Vardé
http://www.eduvarde.es.tl/
21/03/2010

Horas fúnebres

...


Domingo primero del mes, algo huele mal, no estás, desde ayer que espero tu llamado.
Sábado anterior. “Si mi vida, después nos vemos.”
Viernes anterior: “Hoy vienen los chicos a casa”

Vacío.

Ahí está el celu, tirado sobre el sillón. Creo que todavía funciona, no lo quiero ni ver, le escapo. Es que me tiran las ganas de llamarte. Pero sé que ya nada es lo mismo. Aunque no lo quiera admitir.

Amor o costumbre.

Otra semana se viene, la distancia una vez más me deja huellas de soledad solitaria sin más que tu voz. Te extraño, gordo. Yo también, mi reina. Y suena el mudo reloj contra el kilometraje desahuciado.

Se viene el final. (¿Abierto o cerrado?)

Cobarde mensaje que nos junta en un punto neutral, exequias de un abandono anunciado. Que no sos vos, soy yo. Que un por qué anda dándose la cabeza contra el techo. Que un nudo gigante se pone a contar años, días, semanas, horas, segundos. Que en las manos se ven las marcas de los kilómetros, de las historias compartidas.

Al final, calendario nuevo.

Lágrimas que van lavando heridas, un café abandonado junto a la guitarra y la copa vacía admiran la letra de esa canción que lleva las frases que te escribí escondidas entre un anagrama. Sí, todavía te amo. Qué se le va a hacer, me miento entre resignación dudosa.

A mirar al horizonte…

¡Ni se te ocurra aparecer en él!

Edú Vardé
http://www.eduvarde.es.tl/
21/03/2010

Anagrama de las noches contigo


Anoche tuve un sueño... decia así:


"Ya tengo escrita tu realidad y el futuro hermoso sólo para dos.
(Simplemente te amo)."

miércoles, 10 de marzo de 2010

El secreto...

Quien adivine primero sera acreedor del premio sorpresa...


HAY OTRO TIEMPO, EL SUR, DONDE FLURO Y SU ESCORIA DELATORA, GASTA.
(MOMIA MET SENTE PLE)

Facil...

Responde a eduardovarde@hotmail.com

PASEO

Necrológicamente el tiempo se detuvo en su mirada, la muerte que espera siempre paciente se divierte con las vueltas por su casa. Ella tan pequeña como audaz demuestra su afición a la locura. Ellos impacientes ganadores apuestan gotas de sal en sus pasos. La primera esquina deja lugar a un temblor, a la vibración final de un alma errante. El anciano que busca recodar lo irrecordable se deja caer tras la tumba de una pena con sabor a pasado y olor a eterno.
Ella ríe con cautela, sabe bien que los demás no escucharon el mensaje...
De su mano cada uno fue buscando el rincón ideal para dejar los 21 gramos de su alma, esa que ya no tiene dueño. La noche asciende como manto de estrellas sobre la paz del cielo y dos nubes dibujan un rostro conocido. Dios está sentado en el cerro, observa con paciencia los ecos del caminar, intenta escuchar como los ganadores pierden la esperanza sin pedir auxilio. Nada los obliga a entrar, pero ella los convence de conocer el nuevo mundo de su mano. La vuelta no tiene retorno.
Cuando el último viajante se arrodilla frente a la tumba de su mujer perdida, pide como deseo ver el rostro verdugo de su guía. Ella convencida de su bondad y sin poder decir que no al pedido, lentamente desenvaina su letal mirada…
Él lo sabe, siempre lo supo, por eso la buscó para este trabajo. Era ella, la mismísima muerte en el rostro de su amada.

lunes, 8 de marzo de 2010

Mayúsculas



Mujer que guardas en tus manos el pan de amor, el calor de una caricia que cura dolencias y el color de tu mirada que me llena el alma.
Mujer que tienes en tus canas las hazañas y proezas de criar las criaturas de la manadacon la simpleza del habla.
Mujer que vistes tu hermosura con el canto de mañana, si te bañas tras las noches del secreto de tu cama que contiene escondida la gloria de tu almohada.
Mujer que entregas todo sin dudarlo un segundo, la vida por el fecundado dentro de tu ser profundo, el alma por el amor que se engendra en un minuto, el corazón enamorado de tu ilusión al nuevo mundo.


Esa eres tú, mi MUJER con mayúsculas.


La que junto a tu “M” de magnifica conjugas madre con melancolía y se vuelve en mis ojos el sabor que simplemente sos única. Con esa “U” que le sigue vas enganchando en mis manos sin enredar mis palabras la precisa “J” de justa. Porque justamente por una mujer como tú venimos al mundo, porque justamente tú sabes discernir con facilidad entre el bien y el mal, y porque justamente tú me enseñaste lo que es vivir. Sé que tienes la “E” todavía flameando entre el destino que nos toca padecer y comprender la entereza de ser pilar del destino, de ser autora de nombres que amo, de ser amor para el mundo mío, de conquistar corazones y prados, de ser mía de a ratos cuando vuelves sin permiso, de ser luz y colores tras la lágrima de alivio, de ser castigo en mis soledades educando la vida que pide azotes, de ser pionera del viento, ser plato y mano noble, de fantasear con mis soles dibujando lo que viene, de ser más que un grito eterno que exclama mi redención sin perdones, de ser la más bella del mundo sin dudas ni incertidumbre, de ser la mujer por excelencia y la más buena cocinera, de ser mi dama blanca, mi ángel y mi esperanza, de ser la 10 de mi esquema, de no encontrar quien compara, de ser simple como el tiempo y sin temor me arropabas, de ser terror cuando todo en el universo se me acaba y ser contrapuestamente la luz que refleja mi mirada, de ser la rosa del cielo que crece en mi media morada… de ser justamente en mi vida mi Rosa más amada.

martes, 19 de enero de 2010

Aquel día indignado



LIGHT FROM A MONITOR

I feel I wasted the end of my life sitting at the cold light of this monitor.
I feel the desolate sound of the keys that do not sing, who do not speak, do not laugh, do not embrace.
.. ..
I feel like I spend twenty-four hours sitting here no more than ten fingers move individually, is the fate that I myself have to be forged
murderer of your love to me, your love without me.
.. ..
I have a sonnet of my body distant sedentary an ode to your memory and to fade out of my life.
That turns off sitting here wasting human
without strength or cause to be reborn.
.. ..
Sore hands with nothing to do.
No song.
Without love.
The red eyes of hate or fatigue.
At the end of the day.
Today, for me, are the same.
.. ..
For in the end and dies.
.. ..
The lacrimal cultured sea and storms that choke while never happens, that's not going,
do not forget to remember.
.. ..
The red eyes of hate
or fatigue.
At the end of the day.
Today, for me, are the same.
Cuantas caras que van y vienen y yo extrañando a quien no quiere ser extrañado

TI AMO


Apri gli occhi, coperte Destapate vecchio che ti tengono caldo e sicuro a letto.
Resto il piede sinistro al lato sinistro del letto e si apre la porta della stanza da bagno con le stesse sinistre universalmente considerato sfortunato. Non essere ignorante come per farti convincere sciocchezze superstiziose.
Lavare la faccia, i denti, sorriso allo specchio e dite a voi stessi che la vita è la felicità. Conosce i momenti e le esperienze sono tesori inestimabili che sono la natura e la sfumatura è che a volte non ci piace.
Aprire le porte e le finestrela tua casa, smettere di correre l'aria, il vento. Non importa che l'inverno si sta avvicinando velocità incalcolabile. Ovviamente, fa freddo fuori, ma qui, in mezzo l'anima governa il calore dell'amore e della pace, che si esprime tra le farfalle nello stomaco e il diritto apprensione vicino al cuore.
Saluto cordialmente tutti e ciascuno di quelli che passano attraverso la finestra, la vostra casa, per il cuore e la vostra vita. Non ti preoccupare, che tipo di persone sono state, sono o saranno. Essere soddisfatti di quel momento arriva per tutti noi e che, come tanti momenti felici, come tanti sorrisi a noi per mantenere i ricordi andare. .
Chiarire i vostri obiettivi e la flessibilità nel correggere gli errori, ma non una punizione, ma un posto di tirocinio.
Flying detiene questa penna che viene fornito con le mie braccia di distanza e che questo è un segno che non si perdono mai la vostra pace. fino all'ultima goccia di passione, affetto e di devozione che stare in silenzio per i suoi amici.
Ricordatevi che siamo noi gli autori del libro della nostra vita e colore a mettere dipende solo da voi.
Preparare un thermos e compagno e piedi, da dove si sta assumendo uno o due sorsi del suo elisir redentrice.
Circondatevi con il vostro affetto e viaggia distanze in anima e corpo per stringergli la mano. E se non può viaggiare, baciare una revolea furtiva verso il cielo. Loro sanno come arrivare e sono più efficaci di un sms.
E, infine, guarda il cielo e pensare, amico, che quando mi farà lo stesso. Portarmi il badge che dice "nel mio petto."
Cuando la amistad es algo mas que palabras

LA GRUA EA PAZ



A pena pousou na minha mão e deixe o beijo da paz vento no meu cabelo.
Caneta e desenhos beijo de destino deverão ser armados concebida.
Destino que planejou o riso de volta ao seu lugar como o sol estava nascendo.
O sol esperado para a nuvem contendo as lágrimas purificadas.
O refúgio chorando, enquanto seu irmão nunca quis ser.
O tempo é muito injusto para chegar a sua casa me separava do seu lado.
Separada como a nuvem não estava chorando, apesar de nuvens no céu.
O céu brilhou venerável um momento sobre os edifícios e brilho, que deixou o mundo Pavido, ofegante e confuso.
Confuso com o brilho que você não sabe de onde veio.
Se a nuvem ou a paz surgiu o grito que foi ouvido da minha alma.
Alma de um santo que espalharam twenty-pessoa suspira flash.
Suspiros da luz sagrada do homem que se agachou ao meu lado.
Light pediu-me para seguir o caminho que funcionou sem espamentos.
Maneira de jogar seu corpo morto perguntou sobre um outdoor. Poster que me ajudou a roubar beijos que eu pertencia, beijos em seus lábios tinham o brilho da luz que eu amo.
Light em seus lábios buscando a água que não estava no meu bolso.
Água escorrendo por seus olhos que tinha muito a dizer e se escondeu.
Pocket guardar suas chaves e uma moeda de ouro reluzente baixo valor no mercado negro de sonhos desfeitos.
Sonhos como o milagre da minha língua tocando o grito de paz.
Scream que deseja tê-lo entre minhas roupas de cama calentitas.
A cama estava tão longe eo botão deve ser desfeita.
Botão de sua obscuridade Gamulán onde ele perdeu a mão.
A mão, minha mão acariciando a vergonha que você tinha.
Minha vergonha que superou vigor porque ele tinha de lhe agradecer.
Obrigado, em um momento de fraqueza eu temia não quereria
Fragilidade de ferro foi feita conforme o esperado fé destemida conquistar todos os seus medos.
Seus medos estão em seus olhos quando ele reflete a e traçar o caminho que se move no sentido da estrela.
Insanidade produzida por amor, dor e viver pensando no amanhã.
Amanhã vou levar apenas lembranças de uma noite.
Uma noite que prometia milhares de desenhos.
Star não foi brilhante porque era o dia, Eu não esperava o dia que você voltar o meu.
Se a minha era a chave, o ritmo e metro versos anônimos que se amarram em beijar a minha paz.
A paz que eu tirei a bolsa onde guardo meus tesouros e colocá-la em seu peito para me tornar devoto um mártir.
Devoto mal o seu amor só para amar você. Para amar você e você se agarrar a minimizar o tempo as partes.
As partes dos fragmentos da maldita loucura cotidiana.
Projetos simples e casual, mas em seus olhos é um mundo e na minha dor de um pássaro tem uma asa quebrada.



(("todo es cuestión de no dejar que el suelo se acerque a nuestro pies))

sábado, 16 de enero de 2010

Gracias señor por traducir mis pensamientos

“…es que todo cuento queda pobre frente a los rayos fértiles de tu mirada, tierna historia que me desarma el habla, desconjuga mis verbos, enciende mis ganas y con los saltos y brincos desarma a su antojo mi morada.
Si no hay más bella princesa que tú, mi niña de ojos bellos, cristal y almendra., y ya no hay poema que lea en las noches y me llene de un respiro la fe y el alma, sino se llena tu risa audaz al ver el alba sin las caricias que te consuelan.
Ya no hay palabras que asomen mi fea tu piel cubierta de bendiciones, de llanto en secreto, de pasos y reveses, aún esperando el milagro ardiente de verte fuerte, crecida y sana.
Sé que no tengo en la sangre de mis manos las luces guiadas a un posible mañana, sin tu sonrisa que estalla en amores entre mil caricias desesperadas que enmarcan las luces de tus colores.
Sinceramente, no hay nada que eleve mi corazón, como tus manos aterciopeladas, pequeñitas, dulces y frágiles cuando duermes y sonríes entre la paz, sin padecer tu pena esa que lentamente se fue haciendo nuestra…



Y no hay cuento que brille en la tierra, ni destello de aura que se compare con lo simple que esconde tu arte, cuando al atardecer en el parque juegas y junto a ti baila feliz el universo… ”

Para vos, princesa.
Edú Vardé

lunes, 11 de enero de 2010

El principe del manicomio /5



Me siento muy a la moda
con esta camisa blanca, sucia y mal oliente
que me ata los brazos
pero no las ideas.

el principe del manicomio /3

Me paro frente al espejo, viejo amigo abandonado gracias a la dejadez y me digo:


...!opmeit us eneit odoT¡


En esta carta te cuento que gracias a tu adiós mudo mi mundo creció... después de arrojarme de lado como papel viejo volviste a decirme que hoy me ves como uno más de tus pares... y, sinceramente, no quiero serlo siquiera por un segundo.. quiero ser más, ser luz, ser aire, ser necesario para tu vivir... quiero no ser tu adiós mudo... quiero que sientas lo mismo que sentí yo... pero no ser la nada en el aire...
¡Quiero decirte que no a la cara!...







:sapes euq y...
!ritnem és niébmat euq¡

ZAP Y SOIDA

!!!OMA ET¡¡¡

Principe del manicomio /1

Conversación utópica

Si nos vemos mañana hay fiesta.
Si nos vemos mañana ¡ay!
Si nos vemos mañana.
¿Si nos vemos?
Si, ¡Nos!
¡Sí!

Edú Vardé

domingo, 10 de enero de 2010

Se podría decir...

Se podría decir que estoy como nunca.
Se podría decir que simplemente te extraño.
Se podría decir que aún sigo en el viento
perdido en tu sueño, girando y girando...



Se podría decir con la velocidad que inquiere la luz
que ciegamente te quiero como no quiero a ninguna.
Se podría callar al tiempo y burlar al destino
mirando en silencio tu claro de luna...



Se podría comprender los secretos de la guerra
con sólo rozar un instante de tu alma.
Se podría quebrar al llanto y destruirlo
con besar al sol sobre tu frente calma...



Se podría decir que te abrazo en mis sueños
y te llevo a recorrer de mis manos las dunas.
Se podría decir que yo ya no entiendo
sentirme perdido sin tu dulce hermosura.


Se podría decir que sé que tú me quieres
de la misma manera que se quiere al amor.
Se podría decir que tras tus pasos se pierden
las razones que invaden a mi corazón...



Se podrían decir... ¡¡tantas cosas reales!!
Que eres mi día, mi noche, mi auge y paz,
que sabes que eres mi vida completa
y que dentro de ti renace mi andar...


Que canto, río, lloro y danzo
bebiendo de ti los besos de amor,
que voy soñando prendido en tus pasos
el silenciado dilema de nuestro mirar...



Podría decirse que todo lo creo, todo lo soporto,
que es benigno esto que siento que por ti,
pero bien sabido tenemos que este secreto escondido
ni con la mirada se puede decir...



y te pregunto entre la brisa que vuela tras mi beso distante,
que llega a tus mejillas para sentirnos en paz
sin esperar respuestas que contradigan
lo que sé que sabes que sabemos y debemos callar...


Me pregunto y no entiendo
de amar lo que enloquece
y te pregunto al soñar:
¿Vos sabés los por qué?



Edú Vardé
10/01/2010